El IMAS apuesta por programas específicos para reducir el abandono escolar de los adolescentes y facilitar la búsqueda de empleo

El Instituto Mallorquín de Asunto Social (IMAS) ha firmado por primera vez la concertación de 40 plazas con la Fundación Diagrama para desarrollar un servicio socioeducativo de inserción laboral para jóvenes de entre 14 a 17 años. Mediante este concierto se pretende ofrecer una atención personalizada a los adolescentes que se encuentran en riesgo de abandonar el sistema académico o de no superarlo, y facilitar su integración social y en el mundo laboral.

En concreto, el programa está dirigido a personas menores de edad con medida de protección que se encuentran en un momento de crisis adolescente que les puede llevar abandonar los estudios o bien a suspenderlos y que, por tanto, requieren una atención especializada o reparadora para prevenir o mermar el daño emocional o los problemas conductuales o de personalidad que presentan.

«Trabajamos para implantar fórmulas alternativas que ayuden a estos jóvenes a integrarse social y laboralmente, y lo hacemos según las características de cada uno de ellos y en un ambiente de proximidad que no les puede ofrecer la educación reglada y que es clave para poder sacar el máximo provecho de sus habilidades», ha destacado la presidenta del IMAS, Sofia Alonso.

Después de una valoración previa, a cada participante se le diseña un itinerario específico encaminado a favorecer la autonomía personal y mejorar sus aptitudes. Para ello, se ponen a su alcance recursos que le permitan mantenerse o reinsertarse en el sistema educativo formal o bien que le orienten en la adquisición de habilidades profesionales y le enseñen tareas de búsqueda de empleo de acuerdo con sus necesidades e historia personal.

La atención específica para los jóvenes de 14 y 15 años contempla orientación y formación que complementa su itinerario y es un recurso formativo básico que apoya al centro escolar y evita procesos de conflicto social. En el caso de jóvenes de 16 y 17 años y que ya están en edad laboral, se ofrece apoyo en la búsqueda de empleo, que incluye una parte de información general sobre el mundo laboral y una parte práctica, acompañada de investigación de trabajo, destacando los aspectos de participación, creatividad, flexibilidad y educación en valores.

La directora insular de Infancia y Familia, Mara de los Ángeles Fernández Valiente, ha recordado que “evitar el fracaso escolar y dar la oportunidad de acceder a un trabajo de calidad es clave para garantizar el bienestar futuro de los jóvenes que tenemos en acogimiento . Con la concertación de estas plazas damos estabilidad a un recurso que nos permite asegurar que cuenten con las herramientas necesarias para el éxito en el proceso de transición hacia la vida adulta».

Además de realizar seguimiento de los jóvenes en proceso de emancipación, el servicio contempla un programa alternativo de atención especializada a jóvenes con amonestaciones continuadas en el centro escolar. Se les atiende los días que estén expulsados ​​del instituto y se aprovecha para reforzarlos en las materias que el centro educativo considere adecuadas para que no pierdan el ritmo académico durante la expulsión. También se trabajan con ellos aspectos personales como la asunción de normas y responsabilidades, las habilidades sociales y el respeto a los demás, el autocuidado y la autoestima.

La media de tiempo de atención es como mínimo de 15 horas mensuales repartidas en talleres de invierno y escuela de verano, que es de carácter más lúdico, aunque contempla también clases de inmersión lingüística dirigidas a personas menores extranjeras no acompañadas.

El convenio entre el IMAS y la Fundación Diagrama para el concierto 40 plazas del Servicio Socioeducativo de Inserción Laboral para jóvenes de entre 13 y 17 años es para dos años, prorrogables dos años más y se basa en la filosofía de IMAS de ofrecer servicios especializados adaptados a las necesidades reales de las personas usuarias. En este sentido, en el marco de este servicio, un total de cuatro educadores y educadoras a jornada completa atenderán personalmente a cada uno de los jóvenes para garantizar que puedan realizar el proceso a su propio ritmo.