El Servicio de Salud suscribe un convenio de colaboración con la Asociación Dislexia y Familia (DISFAM)

El Servicio de Salud ha suscrito un convenio con la Asociación Dislexia y Familia (DISFAM) para colaborar en el diagnóstico de trastornos del aprendizaje como la dislexia, discalculia y otros trastornos asociados, para asegurar el diagnóstico diferencial de otros trastornos del neurodesarrollo, prioritariamente el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDHA). El documento ha sido firmado por el director general del Servicio de Salud, Javier Ureña , y por el presidente de DISFAM, Iñaki Muñoz.

Con la firma de este convenio, se contribuye a proporcionar una atención integrada a las personas con trastornos del aprendizaje. En este sentido, DISFAM se compromete a realizar doce evaluaciones mensuales a lo largo del año; es decir, 125 evaluaciones anuales.

La dislexia es un trastorno de origen neurobiológico y generalmente hereditario. De las personas con dificultades para leer, es probable que entre el 70 y el 80 % tengan algún tipo de dislexia. Se estima que entre el 5 y el 10 % de la población tiene dislexia, pero esta cifra también podría llegar al 17 %.

La detección precoz es vital para evitar otros muchos trastornos y enfermedades que atiende el sistema sanitario público como consecuencia de no haberse diagnosticado y tratado pertinentemente en la edad recomendable. En este sentido, es a partir del inicio de la educación primaria cuando se puede empezar a detectar, mientras que el diagnóstico puede confirmarse habitualmente a partir de los ocho años.