GOB: Mañana comienza la descarbonización de la producción eléctrica en Mallorca

Han sido muchos años de incidir en un tema clave, cuando la problemática del cambio climático no era aún tan presente ni en el debate político ni social. En 2010 el GOB presentó el informe en el que exponíamos los impactos de la producción eléctrica con carbón y pedimos a la entonces Consejera Vives, la creación de una Mesa de Diálogo pe futuro energético porque estábamos seguros de que este futuro debía planificar con tiempo suficiente para hacerlo bien, sobre todo en relación a la seguridad de suministro y los puestos de trabajo asociados. La Mesa no se creó nunca y en 2011 empezamos a reclamar una Ley de cambio climático y la planificación del cierre progresivo de la central térmica Murterar.

Nada de esto estaba en absoluto previsto ni en la planificación energética, ni al debate político. 2015 insistiremos con la descarbonización del sistema eléctrico. Y no fue hasta 2.017 que pudimos celebrar por primera vez, el anuncio de la decisión de la Dirección General de Energía de abordar el cierre de la central. Tuvimos pero de reaccionar después contundentemente contra la negativa del Ministerio a autorizar el cierre. Por primera vez pero, las peticiones ecologistas se aliena con la demanda del gobierno de las Islas.

2018 junto con el Observatorio de la sostenibilidad lanzamos a los medios del estado y los locales 5 razones más por el cierre Murterar y el mes de diciembre de 2018, junto con las entidades de la Red de Soberanía Energética, hicimos la última acción a la central para reclamar el cierre.

Finalmente hoy celebramos que mañana, dos de los motores dejarán de funcionar como parte del desmantelamiento progresivo de la central térmica del Murterar de Alcúdia. Un paso que no tiene vuelta atrás y que era un paso imprescindible para la transición energética necesaria, imprescindible y urgente para abordar con responsabilidad la crisis climática.

Hará falta todavía mucho trabajo para avanzar en la planificación territorial de las nuevas infraestructuras de producción energética para evitar errores como la dispersión de parques fotovoltaicos en suelo rústico en manos de pocos inversores que monopolicen una vez más la producción eléctrica renovable evitando el opotunitat de que las renovables esdeguenguin una herramienta de democratización de la producción energética, adaptada a la realidad territorial, salvaguardando el suelo rústico y previendo la utilización de las superficies ya urbanizadas. También será necesario abordar con inversiones políticas de eficiencia y sobre todo de racionalización de la demanda que no puede seguir creciendo y pretendiendo no asumir más cambios que los tecnológicos. El cambio de modelo es también necesariamente un cambio de modelo de consumo y también de modelo económico en general.

El reto energético es grande e imprescindible. Celebramos un paso indispensable y seguir trabajando, con la fuerza y ​​legitimidad que nos dan nuestros socios, para lograr una transición energética urgente, justa y sostenible.