Actualizado el 16/10/2019 07:08 Compartir
Esta medida se toma después de que algunos vecindarios mostrassin su malestar por algunos comportamientos que califican 'de incívicos' de jóvenes y niños.
Con el fin de atender este malestar, la alcaldesa ha emitido también un bando en el que se recuerda la ordenanza municipal que regula las medidas para una buena convivencia y en el que, además, se estipula que el incumplimiento de esta puede implicar multas de hasta 1.500 euros.
El consistorio subraya también que incrementará la presencia policial en horas de más afluencia, como medida disuasoria, aunque recuerda que es necesaria la implicación de todo el pueblo para garantizar la convivencia y que el modelo de ciudad por el que se debe trabajar debe tener como prioridad los niños y jóvenes y el fomento de su buen desarrollo y crecimiento en todos los sentidos.
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