Actualizado el 15/06/2021 17:00 Compartir
En este sentido, la convocatoria de ayudas contempla que sean subvencionables inversiones materiales e inmateriales, como la construcción, adquisición o mejora de bienes inmuebles, la compra o arrendamiento con opción de compra de nueva maquinaria y equipamiento hasta el valor de mercado del producto, los costes derivados de estos gastos, y las inversiones intangibles como la adquisición o desarrollo de programas informáticos y adquisición de patentes, licencias, derechos de autor o marcas registradas, entre otros.
Esta línea de subvención responde a los retos a los cuales se enfrenta la agricultura, que vive un proceso de transformación estructural derivado de muchos factores. Por otro lado, la difícil situación generada a las empresas por la crisis sanitaria exige a la administración un esfuerzo de impulso que facilite la modernización y mejora de las instalaciones dedicadas a la transformación y comercialización de los productos agroalimentarios. En Baleares, es necesario promover el desarrollo sostenible del sector agroalimentario, en el ámbito económico y medioambiental, para mejorar la eficiencia y la competitividad en el mercado mediante inversiones físicas que impulsen la implantación de nuevas tecnologías, la orientación hacia productos de calidad reconocida, especialmente la producción ecológica, la diversificación de las producciones y, todo esto, con la perspectiva de la mejora medioambiental, la seguridad laboral y el mantenimiento de las condiciones de higiene y bienestar animal.
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