Pedro Sánchez asegura que 'esta vez los más pudientes tienen que arrimar el hombro para sacar adelante el país'

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este sábado, durante su intervención telemática en la IV edición del Foro de La Toja, el paquete de medidas fiscales acordado esta semana por el Ejecutivo. Sánchez se ha referido al impuesto de solidaridad de las grandes fortunas para señalar que, "esta vez, los costes de la crisis no pueden recaer en exclusiva en la clase media trabajadora, como ocurrió tras la crisis financiera. Esta vez -remarcó- los más pudientes tienen que arrimar el hombro para sacar adelante el país".

Sobre el alcance del plan fiscal, que Sánchez definió como una propuesta "comprometida con la equidad y la justicia social", aseguró que "permitirá elevar la recaudación en unos 3.144 millones de euros, en dos años". Y que "solo la subida temporal del impuesto de Sociedades cubre prácticamente todo el presupuesto de becas y ayudas del curso 2021-22, más el aumento extraordinario de 100 euros por estudiante aprobado el pasado mes de julio". Del mismo modo que la subida del IRPF a las rentas del capital superior a 200.000 euros, cubriría los 172 millones de refuerzo extraordinario a la atención primaria aprobados hace unos días por el Consejo de Ministros, lo que le llevó a preguntarse "¿dónde está mejor el dinero?, ¿en unos pocos bolsillos o en la atención primaria que nos protege a todos y salva vidas?".
Asimismo, explicó que, con la propuesta del Ejecutivo, "un trabajador casado con un sueldo de 19.000 euros y declaración conjunta, se beneficiará de un ahorro de más de 330 euros. Un pensionista que cobra una pensión inferior a 16.500 euros, tendrá un ahorro de 689 euros. Y una trabajadora monoparental con dos hijos y un sueldo por debajo de 18.500 euros, se beneficiará de un ahorro de 516 euros".

Mayor ahorro con las medidas del Gobierno que con la deflactación

Respecto a la medida formulada por quienes, desde distintas formaciones políticas se han mostrado partidarios de una deflactación lineal y carente de progresividad, ya en vigor en alguna comunidad autónoma, puso el ejemplo - entre otros- del ahorro que implica su aplicación a un trabajador sin descendientes que gana 18.000 euros, y que es de tan solo de 23 euros. Sin embargo, "con la reforma que el gobierno plantea el ahorro es de 746 euros, es decir una cantidad 30 veces superior". "Esa es la diferencia y lo demás es confusión y una gigantesca cortina de humo", sentenció.
También apuntó que "el Gobierno tiene claro que cualquier alivio fiscal debe centrarse en la mayoría social, no en beneficiar a unos pocos, que siempre suelen ser los mismos: poderosos y minoritarios". Y que "en las circunstancias actuales es necesario pedir un esfuerzo de solidaridad a los que más tienen, para ayudar a financiar la protección de la inmensa mayoría".
Aseguró además que este paquete fiscal "reduce la brecha de tributación entre las rentas del trabajo y del capital", y "contempla medidas de alivio con un alcance potencial de un millón y medio de autónomos y más de 400.000 pymes"

¿Qué estado del bienestar queremos?

Partiendo de las enseñanzas recibidas a raíz de la crisis pandémica, Pedro Sánchez ha insistido en que "no hay mayor herramienta para combatir la desigualdad y defender la justicia social que el estado del bienestar", que a su vez requiere de "justicia fiscal". Y que "la pregunta que debemos hacernos es ¿qué estado del bienestar queremos?", porque "lo que no podemos pretender es tener un estado del bienestar como los países nórdicos, con niveles de ingresos fiscales propios de países menos avanzados". Por tanto, si queremos un estado de bienestar europeo, éste "deben costearlo todos los ciudadanos en proporción a sus ingresos".
En este punto, ha recordado las últimas directrices emitidas por organismos como la OCDE, el FMI, y el BCE, "que aconsejan gravar las rentas más altas para proveer así de servicios y de protección a las clases medias y trabajadoras".
O también lo ocurrido en el Reino Unido, donde "una propuesta mal planteada y con grave riesgo para la sostenibilidad de los ingresos" del país, ha provocado el desplome de la libra y el aumento exponencial de los tipos de interés. "Es entonces -afirmó- cuando vemos el dogmatismo neoliberal, que hace aguas y se enmienda a sí mismo".
En su defensa de un estado del bienestar y un sistema público de protección fuertes y adecuadamente financiados, el presidente también ha advertido contra los "brujos que rescatan sus fracasadas recetas y proclaman que 'el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadanos'". Entonces, "¿queremos que las soluciones dependan del bolsillo de cada ciudadano?", "¿nos entregamos a la doctrina del 'Sálvese quien pueda'?", se preguntó.

Las medidas adoptadas empiezan a surtir efecto

Respecto a la inflación, Sánchez ha señalado que "mitigar" el enorme impacto de la subida de precios en la economía real, es "una prioridad absoluta, y a ese fin el gobierno ha movilizado ayudas por valor de más de 35.000 millones de euros, equivalentes al 2,9% del PIB".
Y, en cuanto a los datos adelantados del mes de septiembre que hemos conocido días atrás, afirmó que "la moderación de los precios indica que las medidas adoptadas empiezan a surtir efecto y que avanzamos en la dirección adecuada". Aun así, añadió, "conviene no bajar la guardia en un escenario global tan complejo" y estar "preparados para actuar ante cualquier eventualidad".

Europa está ante una encrucijada

Ya en la parte final de su intervención, Pedro Sánchez ha reconocido que, "una vez más, Europa está ante una encrucijada", y que, aunque "existe cansancio" y un cierto "descontento" social, es preciso seguir la ruta que "nos ha señalado en su respuesta a la pandemia y a la guerra en Ucrania", que no es otra que la de "una Europa capaz como nunca de actuar de manera unida, valiente y solidaria ante amenazas y retos históricos".
Esa Europa "que ha establecido la transición energética, la revolución tecnológica y la lucha contra toda forma de desigualdad como valores centrales", es "la Europa por la que merece la pena trabajar" y "la que estamos fortaleciendo desde un papel protagonista"; porque "España -dijo- pocas veces había tenido tan decisivo papel en el desarrollo del proyecto europeo como ahora".

Ucrania e Irán

El presidente comenzó su discurso refiriéndose a la anexión que ha llevado a cabo Rusia en territorio ucraniano, tras un "referéndum de pantomima", y que ayer Putin celebraba "mientras bombardeaba Zaporiyia asesinando a civiles inocentes".

Sánchez aseguró que "ni España, ni Europa, ni el conjunto de la comunidad internacional, vamos a reconocer nunca esa anexión ilegal y exigimos a Putin que abandone Ucrania cuanto antes poniendo punto y final a esta guerra injusta e ilegal". A su juicio, el autócrata ruso "sabe que no está ganado la guerra y sabe también que está muy solo. Cuanto antes tome la decisión correcta de poner fin a la guerra, será mejor para todos; también para él", añadió.

Las últimas palabras las dedicó el presidente a las mujeres de Irán, mostrando admiración por su "valentía" y reiterando la "rotunda condena" del Gobierno ante la "represión ejercida" contra ellas. "No hay tradición, costumbre o creencia que pueda justificar el uso de la violencia para coartar la libertad y los derechos de las mujeres", afirmó Sánchez, para quien "la lucha por la igualdad es universal y se libra en muchos frentes", por lo que "no podemos dar ni un paso atrás en los derechos y libertades que afectan a la mitad de la población".

Continuar con el exitoso proceso de vacunación frente al Covid

El jefe del Ejecutivo, que ha clausurado esta IV edición del Foro de La Toja por videoconferencia a causa de su positivo en covid -aunque ha dicho sentirse "bien" y únicamente con síntomas de "gripe"-, ha aprovechado para "animar a todos los ciudadanos, ahora que vamos a empezar la estrategia de vacunación frente a las distintas variantes" del virus, "a que, cuando las autoridades sanitarias así lo indiquen, continúen con este exitoso proceso de vacunación que hemos tenido en nuestro país".