Aumenta la delincuencia femenina en Baleares

Los menores, en sus diferentes modalidades, protección e infracción, suponen un porcentaje importante en la sociedad. Podemos afirmar casi con total certeza que todas las personas a lo largo de su vida han cometido al menos una infracción. La particularidad reside cuando la carrera delictiva se inicia a temprana edad y la tipología a la que esta vaya asociada.
Actualmente los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) muestra que en las Islas Baleares se ha ido produciendo una disminución de la delincuencia juvenil desde el año 2013 hasta el 2017, pasando de tener 550 condenados a 498.

Lo que a priori puede parecer un avance se disipa rápidamente al exponer que Baleares es una de las comunidades con las tasas más elevadas, a pesar de su reducción, en cuanto a condenadas por cada mil habitantes (11 menores/1000 hab.), ocupando el podio durante el dicho periodo.

Sin embargo, hay un fenómeno asociado a todo este proceso paralelo, el aumento de la delincuencia juvenil femenina. Mientras el número de menores de sexo masculino se ha ido reduciendo, el femenino ha pasado de un 19% en 2013 hasta alcanzar un 25,7% en 2017.

¿A qué se debe este fenómeno?

Los datos proporcionados por el INE en cuanto a medidas adoptadas según sexo muestran que estas han disminuido de cara a años anteriores, de la misma forma que lo han hecho los internamientos y la libertad vigilada.
Las medidas que más se imponen a este colectivo son las prestaciones en beneficio de la comunidad, la realización de tareas socio-educativas y la libertad vigilada, aún lo comentado con anterioridad.

¿Es el aumento de la criminalidad juvenil femenina consecuencia del menor número de medidas impuestas?
¿O las medidas impuestas son insuficientes para dar respuesta a las necesidades y problemas planteados?

Lo que es indudable es que este aumento se produce al mismo tiempo que se reducen los internamientos.

¿Existe relación causal? ¿Se deberían aumentar los internamientos? Se desconoce, pero los datos están presentes.

Antonio Martínez Tuñón