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El protocolo contra la trata de mujeres establece un sistema de coordinación, detección y atención integral a las víctimas

El protocolo contra la trata de mujeres establece un sistema de coordinación, detección y atención integral a las víctimas

Actualizado el 24/11/2018 08:20                Compartir

La elaboración del Plan Autonómico contra la Trata de Mujeres para la Explotación Sexual y la Atención a la Prostitución en las Illes Balears ha dado un nuevo paso con la redacción del Protocolo autonómico de actuación para la lucha contra la trata de mujeres para la explotación sexual.

El Consell de Govern se ha dado por informado de este documento, elaborado durante los últimos meses con la colaboración de los diferentes agentes sociales e institucionales que intervienen en este campo. El objetivo del Protocolo es garantizar una efectiva protección, recuperación e integración sociolaboral de las víctimas.

La trata de seres humanos con fines de explotación sexual y la prostitución forman parte del continuum de violencia machista, que tiene sus raíces en las desigualdades estructurales de género. La mayoría de informes internacionales indican que en torno al 80 % de las víctimas de la trata de seres humanos son mujeres y niñas, y que el 95 % de estas acaban ejerciendo la prostitución.

Este Protocolo se plantea establecer un sistema de coordinación en los procesos de detección y atención integral, protección y derivación, que permitan garantizar los derechos de las destinatarias y contribuir así a la lucha contra esta lacra. Además, define los mecanismos de relación entre las administraciones con responsabilidades en la materia, así como los procesos de comunicación y cooperación entre ellas.

El Protocolo se rige por principios que parten de los derechos humanos y la perspectiva de género, el reconocimiento y el respeto a la diversidad; la interdisciplinariedad, la cooperación y la coordinación, estableciendo el trabajo en red como pilar para el correcto abordaje y la lucha contra esta problemática; la seguridad y la protección de las víctimas como una prioridad en todas las intervenciones, implicando así acciones que van desde la adopción de medidas de prevención hasta el acompañamiento más allá del proceso judicial; la información y el empoderamiento; una mínima victimización para evitar la «revictimización» de las víctimas, y la confidencialidad.

Algunos de los objetivos de este Protocolo son mejorar la detección de las víctimas; aportar una información adecuada sobre sus derechos, servicios y recursos; desarrollar medidas de acompañamiento en los procesos de salida de estas situaciones; favorecer más cooperación e intercambio de información entre la Administración pública, las autoridades judiciales implicadas, las entidades y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a través de canales estables de coordinación y comunicación, y sistematizar la recogida de datos.

Asimismo, el Protocolo incluye el impulso a espacios de coordinación en los principales ayuntamientos de las Illes Balears, con las funciones de abordar la prostitución y la trata de mujeres desde diferentes áreas de intervención, a partir del trabajo en red; el impulso a la sensibilización y la formación, tanto de las instituciones implicadas como de la ciudadanía en general, y el impulso a acciones de investigación para conocer mejor la realidad de la prostitución y la trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual.

Además, prevé la creación de una mesa de coordinación de buenas prácticas en el abordaje de la prostitución y la trata de mujeres, que se reunirá dos veces al año y será impulsada y coordinada por el IBDONA. Finalmente, el Protocolo contará con una comisión de seguimiento y una comisión técnica para evaluar el cumplimiento de objetivos, elaborar propuestas de mejora o unificar propuestas de intervención.


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