Actualizado el 11/09/2019 06:41 Compartir
Tras colgar el lazo, el portavoz ecosobiranista Miquel Ensenyat, ha asegurado que "El lazo amarillo es un símbolo de denuncia amparado por la libertad de expresión. Es una manifestación cívica y pacífica de una idea. Quien no comparta su significado tiene infinitas formas para expresar -lo, pero nunca ocultando o negando la expresión de quien piensa diferente ". Ensenyat también reprochó a quienes promueven su retirada. "El lazo amarillo no va en contra de nada ni de nadie; es un símbolo que reclama libertad para las personas que sufren el encarcelamiento, el exilio y la represión debido a sus ideas políticas, aseguró. En este contexto, Ensenyat ha lamentado el posicionamiento de los partidos que se oponen a los lazos. "Con su oposición a los lazos sólo justifican su aval a la represión y la vulneración de los Derechos Humanos y las garantías jurídicas más elementales". Miquel Ensenyat ha aprovechado que la recuperación del lazo amarillo coincide con el anuncio del PP que quiere aprobar una ley estatal de símbolos. "El PP no aporta nada nuevo. En las Islas Baleares su iniciativa nos recuerda la época de Bauzá y sus manías. Se esconden detrás de la neutralidad del espacio público, pero en realidad con la uniformidad y la ocultación de quien no piensa como ellos ".
Con todo, el lazo amarillo vuelve a colgar de los balcones de los despachos de MES al Parlamento tras haber sido sustituido durante unos meses (por imperativo de la Junta Electoral) por el símbolo del "Sinsajo" o "muntagarlaire" de la saga de ficción " los Juegos del Hambre "en el tono verde claro corporativo de la formación. En el universo de las novelas de Suzanne Collins, la protagonista (que en el cine encarnó la actriz Jennifer Lawrence) luce un broche con un pájaro, el 'Sinsajo', como símbolo de la resistencia contra el Gobierno totalitario de este universo ficticio.
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