Empiezan las obras de restauración del dominio público hidráulico afectado por las inundaciones del Llevant

La restauración del dominio público hidráulico afectado por las inundaciones del Llevant de Mallorca del 9 de octubre han comenzado este miércoles después de que la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca ordenara la contratación de las obras de emergencia para la recuperación de la funcionalidad de los torrentes y la restauración de las zonas afectadas por un importe de 25,5 millones de euros.

Las actuaciones consistirán en la limpieza y restauración de la capacidad de drenaje de los cauces del torrentes y zonas limítrofes (incluyendo la retirada y colocación de sedimentos), la demolición de muros y estructuras que hayan quedado descalzadas o en situación precaria y la retirada de posibles focos contaminantes (residuos) en las cuencas de los torrentes comprendidos entre ca na Borges y ca n'Amer.

Las tareas se han iniciado un día después de que los técnicos de la Dirección general de Recursos Hídricos se reunieran con los representantes municipales de los ayuntamientos de Sant Llorenç y de Artà para informar de las tareas y para establecer los canales de comunicación en cada zona.

En algunos casos será necesaria la autorización de acceso de los propietarios de las parcelas afectadas, por lo que los ayuntamientos se han ofrecido a hacer las tareas de coordinación. Los interesados se pueden dirigir a los ayuntamientos para dar estas autorizaciones.

En el inicio de las tareas se han priorizado los torrentes más afectados. En el torrente de ses Planes se ha empezado con dos equipos, uno en las parcelas más cercanas al casco urbano y otro en S'Illot.

En el torrente dels Revolts, se ha empezado aguas abajo de la Ma-15 y en Cala Mesquida, también, con dos equipos. La próxima semana se prevé empezar en Son Servera y Capdepera y aumentar el número de personal trabajando en la zona.

La zona afectada corresponde a las cuencas de los torrentes comprendidos entre los torrentes de ca Na Borges y ca n'Amer, que tienen una longitud aproximada de 185 kilómetros, de los que se estima que un centenar se encuentran afectados.