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La UIB busca en el ADN de la avispa asiática la vía de entrada en Mallorca y la península Ibérica

La UIB busca en el ADN de la avispa asiática la vía de entrada en Mallorca y la península Ibérica

Actualizado el 27/04/2020 11:13                Compartir

El otoño de 2015, la Universidad de las Illes Balears anunció la detección por primera vez en Mallorca de ejemplares de avispa asiática (Vespa velutina nigrithorax), una especie exótica invasora originaria del sudeste asiático que representa una importante amenaza para las abejas y para la apicultura. Y pronto se cumplirán dos años sin que se haya detectado ningún ejemplar ni ningún nido de esta especie en Mallorca, lo cual podría significar que sea el primer lugar de Europa donde se la dé por erradicada.

Ahora bien, no se puede bajar la guardia. Así lo reconoce la doctora Mar Leza, profesora del Departamento de Biología que participó en la detección y que ha hecho el seguimiento durante estos cinco años: «La avispa asiática es una especie en expansión en todo el mundo, probablemente de la mano del comercio y el transporte de mercancías. Pero, hasta el momento, la comunidad científica solo maneja hipótesis sobre las vías de entrada de esta especie a Europa. Es por eso que resulta de gran importancia determinar cómo y por dónde ha llegado. Si lo sabemos, se podrían establecer las medidas necesarias para impedir o dificultar en gran medida que la avispa asiática se expanda y pueda volver a instalarse en la isla».

El equipo de investigadores de la UIB, que lidera la doctora Mar Leza y en el cual también participan doctor José Antonio Jurado y el alumno de doctorado Cayetano Herrera, se han marcado como objetivo resolver esta incógnita e identificar cual fue la vía de entrada de esta especie en Mallorca y la Península Ibérica.

Para hacerlo, seguirán el rastro de las avispas a través del ADN de los ejemplares capturados en estos territorios en el marco de un proyecto de investigación que tiene el apoyo de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. También colaboran investigadores de la Universidad de Barcelona, la Universidad de Vigo, la asociación AvispaAsiática y el Consorcio de Recuperación de Fauna de las Islas Baleares (COFIB), con el apoyo del Servicio de Protección de Especies de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Gobierno de las Islas Baleares.

Siguiendo el rastro a través de los genes

El estudio parte de la idea que la diversidad genética de la avispa asiática es esencial para comprender las vías de entrada de esta especie, pero también para analizar como fue el proceso de dispersión y el comportamiento de sus poblaciones en todo el territorio.

Para ello, extraerán y secuenciarán el ADN de las avispas capturadas tanto en Mallorca como en varios territorios de la península. A partir de la información genética que se obtenga de cada ejemplar se podrán determinar las relaciones genéticas entre todos ellos y, por lo tanto, se espera también que se pueda llegar a establecer cuál fue el foco inicial desde el cual se propagó la avispa asiática por la península Ibérica y por Mallorca.

Esta información será de gran valor, y los investigadores esperan que los datos que se obtengan les puedan permitir proponer medidas específicas de gestión que contribuyan a reducir el impacto de la avispa asiática y a frenar su expansión.

Especie exótica invasora

La avispa asiática es una especie incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras (RD 630/2013), para la cual existe una estrategia de gestión, control y posible erradicación. Esta avispa depreda otros insectos, principalmente abejas. Su introducción provoca impactos importantes sobre la biodiversidad, dado que la disminución de insectos silvestres afecta la polinización de los sistemas naturales; sobre la economía, especialmente en la apicultura y la polinización de los cultivos; y sobre la sanidad, por sus picaduras.

En Europa, se detectó por primera vez en Francia en 2004, y rápidamente se dispersó por los países próximos, incluyendo España. En Mallorca, el primer ejemplar se detectó el otoño de 2015 y desde julio de 2018 no se ha detectado ningún otro.

En la UIB, el equipo de investigadores que dirige la doctora Mar Leza ha participado en la detección de esta especie, pero de manera muy especial en el seguimiento de su dispersión. En el marco de un trabajo colaborativo, trabajó en la concepción y desarrollo de la plataforma Vespapp (web: http://vespapp.uib.es/; y aplicación móvil gratuita), diseñada para detectar y controlar la avispa asiática. Esta iniciativa obtuvo el premio a la Divulgación de la Sociedad Catalana de Biología en 2017. La investigación que los investigadores de la UIB hacen sobre la avispa asiática también tiene el apoyo de la Unión Europea, que financió con fondo FEDER este proyecto en el marco del PO FEDER 2014-2020 de las Islas Baleares.


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