La Fiscalía pide cinco años de cárcel para dos guardias civiles por torturar a un detenido por usar su móvil

La Fiscalía reclama cinco años y medio de cárcel para cada uno de los dos agentes de la Guardia Civil que serán juzgados por presuntamente torturar, en los calabozos de las dependencias de Sant Antoni de Portmany (Ibiza), a un detenido que había hecho uso del teléfono móvil que no le habían intervenido.

Los dos acusados se sentarán en el banquillo el martes de la próxima semana, a partir de las 10.00 horas, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma. Además de la pena de cárcel, el Ministerio Público solicita que ambos indemnicen a la víctima con 2.976 euros por las lesiones y las secuelas producidas.

En concreto, los hechos tuvieron lugar el 12 de octubre de 2009, sobre las 01.40 horas, cuando, según la Fiscalía, José Ramón R.G y Víctor B.G. -quien se encontraba fuera de servicio- se enojaron a raíz del uso del teléfono por parte del arrestado y se dirigieron hasta los calabozos para tomar represalias.

Una vez allí, sacaron al detenido y lo trasladaron a los baños de las dependencias donde, durante el transcurso de diez minutos, le propinaron golpes en la cara, los brazos, la espalda y las piernas, causándole hematomas, contusiones y erosiones de hasta 20 centímetros en varias partes del cuerpo.

La acusación pública solicita dos años y medio de prisión por un delito de torturas y tres años por el de lesiones, con inhabilitación para el ejercicio como miembro de las Fuerzaws y Cuerpos de Seguridad del Estado durante el tiempo de la condena.