Cort defenderá a los palmesanos de la 'ruina' del sistema de recogida neumática

El presidente de Emaya, Andreu Garau, ha asegurado este lunes que el Ayuntamiento de Palma "seguirá trabajando hasta agotar todas las vías" para "defender los intereses de los ciudadanos de Palma en relación a la ruina del sistema de recogida neumática" después de conocer de la interposición de una querella por parte de Envac Iberia al haber ejecutado la compañía municipal un aval bancario de 240.000 euros depositado en su momento por la UTE instaladora, a la que Emaya le reclama 26,5 millones de euros en concepto de daños y perjuicios.

En un comunicado, Garau ha indicado que la reacción de Envac Iberia "era previsible" después de que la empresa pública, por recomendación de sus asesores legales, decidiera ejecutar el aval de 240.000 tras demandar a la empresa y a Urbaser, la otra integrante de la UTE.

La querella, por presunta apropiación indebida, interpuesta por Envac Iberia SA va dirigida contra el consejo de administración de Emaya. Por ello, Garau ha precisado que, si bien el hecho de demandar a la instaladora por 26,5 millones fue aprobado por unanimidad en el marco del consejo de administración, la decisión de ejecutar el aval fue adoptada por la dirección de la empresa municipal por recomendación de los asesores legales.

Garau ha informado personalmente de la acción de Envac Iberia a cada consejero y ha convocado una reunión extraordinaria del Consejo para este martes.

El sistema de recogida neumática de Palma se encuentra fuera de servicio desde mayo de 2012 y es irrecuperable según los informes periciales encargados por Emaya.

Estos informes también concluyen la existencia de patologías graves en la red derivadas de defectos de diseño y construcción por incorrecta selección de materiales y defectos de instalación de los mismos.