Cort disminuye la policía local de barrio

El PSIB ha asegurado que el alcalde de Palma, Mateo Isern, ha "desviado" a un centenar de agentes de la Policía Local de Palma de las tareas de proximidad a las unidades reactivas, a pesar de que la mayoría de demandas ciudadanas son reivindicaciones de carácter vecinal.

Según ha señalado el PSIB este martes en un comunicado, la policía de barrio ha pasado, con el gobierno de Isern, de 330 a 237 agentes, mientras el modelo policial de respuesta reactiva ha pasado de 50 a 170 policías.

Estos datos se han conocido durante la comisión municipal de Servicios a la Ciudadanía, donde PP y PSIB han contrastado dos modelos de Policía Local para Palma.

En la comparecencia para conocer la reestructuración policial después de la crisis tras la "manipulación" de las oposiciones, el regidor de Seguridad Ciudadana, Guillermo Navarro, ha confirmado que la prioridad de Cort es la seguridad y, por ello, se crearon nuevas unidades de intervención inmediata, "un modelo que no es lo del intendente Vera, sino el del equipo de Gobierno, el alcalde y yo mismo", ha dicho.

No obstante, el PSIB pone en "entredicho" este modelo, tanto "por la falta de eficacia para resolver problemas ciudadanos", como por la "implicación de la cúpula policial y de agentes de las nuevas unidades reactivas creadas por el PP al caso de la manipulación de las oposiciones a la Policía Local".

"Es un modelo que ha fracasado, que ha sacado lo peor de la Policía Local", ha manifestado el regidor del PSIB, Antonio Donaire, quien ha explicado que "la crisis actual surgió a raíz de la investigación judicial de Los Ángeles del Infierno y puso al descubierto una trama desde la cúpula policial y política nombrada por el alcalde Isern para favorecer presuntamente a militantes y simpatizantes del PP".

Según los socialistas, "la pasividad del alcalde en relación a este asunto permite que la situación se agrave cada día y afecte al normal funcionamiento de la Policía y a la imagen del cuerpo, algo que no se merecen los centenares de buenos profesionales que forman parte".

El PSIB ha defendido un modelo de proximidad y ha lamentado que el peso de las nuevas unidades reactivas haya dejado en un segundo plano a la policía de barrio. "Ahora, tres años después, con la crisis abierta en el cuerpo policial, con un centenar menos de efectivos y con el reto de aplicar las nuevas ordenanzas municipales, el PP vuelve a poner encima la mesa la policía comunitaria, con un lavado de cara en forma de cambio de horarios", ha esgrimido el PSIB.

Finalmente, los socialistas han señalado que Navarro ha defendido como "la opción más lógica" el futuro nombramiento del comisario Mut como nuevo jefe de la Policía Local, el tercero de esta legislatura, después de la salida de Vera por imputación en el caso de la manipulación de oposiciones y de Herrero, por jubilación.