Actualizado el 03/05/2016 18:59 Compartir
Así lo pone de manifiesto el magistrado en el auto de transformación a procedimiento abreviado que ha dictado como paso previo a la apertura de juicio oral por estos hechos. En concreto, mantiene la imputación del autor de la maqueta, Ezequiel Mora, y del administrador de Nimbus, Miquel Romero, quien abonó al primero una factura de 31.320 euros, cantidad que repercutió, junto a otros 34.800 euros, a los honorarios que los arquitectos del velódromo habían cobrado del Govern.
En concreto, el juez les imputa delitos de malversación de caudales públicos y falsedad en documento mercantil. Castro ha dado diez días a las acusación para que formulen sus escritos de calificación.
En su resolución judicial, el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma señala que, iniciada la construcción de la considerada infraestructura 'estrella' de la última legislatura de Jaume Matas, Romero encargó a Mora, administrador de la entidad Maquetismo SL, una maqueta de lo que aquélla debería ser, presupuestándose entonces los servicios en entre 24.000 y 27.000 euros.
Unas cantidades en las que se incluían los viajes preparatorios a la ejecución del proyecto, reuniones con personal técnico y el traslado final de la maqueta desde Alicante -donde estaba residenciada la empresa de maquetación- a Palma, así como sus gastos de manutención y alojamiento.
Ultimado el encargo, la mercantil libró una factura final por 31.320 euros que fue satisfecha por Nimbus para luego, a través de una de las entidades de su grupo empresarial, repercutirla a GR1 SL, integrada por los arquitectos Luis y Jaime García Ruiz, encargados de las obras del velódromo, con cargo a los 3,2 millones de euros públicos que ambos recibieron del Consorcio para la Construcción del Velódromo.
La factura fue por tanto repercutida a esta mercantil y abonada por ésta, pero no por la cantidad que había sido abonada al maquetista, sino por la de 57.000 euros más IVA, que ascendía en total a 66.120 euros, "sin que conste la más sucinta referencia a los conceptos que pudieran justificar esa diferencia", asevera el juez.
De forma paralela, el auto señala cómo el administrador de Nimbus solicitó a Mora que librase una factura simulada a la agencia de publicidad por una cantidad próxima a los 8.000 euros por el concepto de transporte de la maqueta desde Alicante a la capital balear, a pesar de que tales servicios ya estaban comprendidos en la facturación de la propia maqueta.
El proveedor accedió a ello librando una nueva factura por 8.391 euros que Romero acabó repercutiendo a GR1 SL, entidad que abonó el dinero con cargo a los fondos públicos.
Copyright © noticiasmallorca.es es una marca registrada. Todos los derechos reservados.