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Un antiguo lago escocés desafía la comprensión de la evolución

Un antiguo lago escocés desafía la comprensión de la evolución

Actualizado el 20/05/2015 20:11                Compartir

Un antiguo lago podría ser la clave para nuestra comprensión de cómo la complejidad de la vida evolucionó en la Tierra, según un estudio realizado por la Universidad de Aberdeen.

Los científicos han estudiado muestras de sedimentos lacustres depositados hace 1.500 millones de años en la región de la Bahía de Stoer, en el noroeste de Escocia, y ha descubierto altos niveles de molibdeno metálico, un elemento clave en la evolución de la vida multicelular.

El descubrimiento desafía la opinión generalizada de que una etapa importante de la evolución, que conduce finalmente a la vida humana, se produjo en las profundidades del océano, en contraposición a un ambiente continental.

El profesor John Parnell, de la Escuela de Geociencias de la Universidad, explica: "El molibdeno es necesario para apoyar la fijación del nitrógeno, lo que permitió el florecimiento de la vida sencilla y apoyar una cadena alimentaria. También se está incorporando a las enzimas utilizadas por la vida compleja.

"Investigaciones anteriores han medido la cantidad de molibdeno en las rocas de los antiguos océanos para evaluar su aportación, pero se encontró que sólo estaba disponible escasamente en el momento en que la vida compleja se estaba expandiendo hace unos 1.500 millones de años".

"Estos nuevos datos, recogidos de un sitio en el noroeste de Escocia en el último año, muestran que las mayores cantidades de molibdeno estaban disponibles en un entorno continental en este momento. Esto apoya la teoría creciente de que esta importante etapa de la evolución avanzó en los continentes y no en el océano ".

El sitio de donde se recuperaron los sedimentos ya se considera un recurso científico preciado, aportando evidencia de cómo un punto crítico en la evolución tuvo lugar varios cientos de años antes de lo que los científicos habían estimado previamente.

Este último descubrimiento subraya aún más la importancia del sitio, cuya ubicación geográfica hace que sea ideal para fines de investigación, como explica el profesor Parnell: "Al llevar a cabo este tipo de investigación, hay muy pocas rocas que se puedan estudiar que hayan sido depositadas en un ambiente terrestre, que es lo que hace que este sitio en el noroeste de Escocia sea especial".

"Hay otras posibles ubicaciones en todo el mundo, pero no son de fácil acceso y no se puede viajar de ida y vuelta para llevar a cabo una investigación seria en ellos. La diferencia con este sitio es que está muy bien conservado y es de fácil acceso, lo que lo convierte en un excelente lugar para buscar el tipo de evidencia que hemos descubierto".


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